
El INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria) anticipó sobre un posible retorno de “La Niña” hacia julio-septiembre. El fenómeno, caracterizado por la escasez de lluvias, parece estar presente en todos los modelos meteorológicos. Ya que evidencian indican un debilitamiento de los valores cálidos de la temperatura del Océano Pacífico ecuatorial.
Desde el INTA dijeron que «se espera que El Niño continúe presente durante lo que resta del verano e inicio del otoño, con una transición hacia la fase neutral del ENSO (El Niño Oscilación del Sur, por su significado en inglés) a partir del trimestre abril-junio».
«Posteriormente, la mayoría de los modelos coinciden en indicar la continuación del enfriamiento del Océano Pacifico central», dice el informe.
Al tiempo que explican que, «hacia julio-septiembre 2024 la mayor probabilidad (más del 60%) se asigna a la fase La Niña».
Recordemos que “La Niña” puede durar de 9 meses a 3 años. Según su intensidad se clasifica en débil, moderada y fuerte, al igual que El Niño. Sin embargo, es más fuerte mientras menor es su duración, y su mayor impacto en las condiciones meteorológicas se observa en los primeros seis meses de vida del evento.

