En horas de la madrugada de este lunes, personal del Departamento de Seguridad Vial de la ciudad de Casilda detuvo la marcha de un automóvil para exigir a su conductor la documentación obligatoria de circulación. Tras el pedido de los agentes de tránsito, el masculino que estaba al volante les comentó que no tenía licencia y tampoco seguro.
Además, los miembros de tránsito notaron cierto comportamiento errático en el habla del conductor por lo que procedieron a realizarle un test de alcoholemia que arrojó un resultado de 2,07 de alcohol en sangre.
Tras esto, se labró el acta de infracción correspondiente y el rodado quedó secuestrado y remitido al Tribunal de Faltas.
Por otra parte, durante el pasado sábado a la madrugada se realizaron 32 controles en la ciudad de Casilda. De ellos no surgieron acoholemias positivas ni remisión de vehículos, solamente se labraron actas por causales menores.