Durante esta mañana de martes se produjo el traslado de unos 40 presos que se encontraban alojados en la Alcaldía Departamental de Melincué.
La decisión se enmarca en una política de gobierno impulsada por el flamante gobernador, Maximiliano Pullaro. La medida tiene la intención de poner a los detenidos en lugares más seguros y que queden bajo la custodia del Servicio Penitenciario. De esta manera, el personal policial ya no tendrá la tarea de custodiar presos y se dedicará exclusivamente a los patrullajes de prevención.
En Melincué, el operativo comenzó a desplegarse a mitad de mañana con la llegada de varias unidades de traslado del Servicio Penitenciario Provincial y otras unidades en las que se desplazaban varias decenas de efectivos que garantizaban la seguridad del movimiento de reclusos a la Unidad Penitenciario 11 de Piñero.
«Trasladamos a 40 detenidos, lo que representa un 25% de los reclusos alojados en la Alcaldía de Melincué que es una de las más grandes de la Provincia», dijo la Secretaria de Asuntos Penales del Ministerio de Justicia y Seguridad de la Provincia, Lucía Masneri.
La funcionario dejó en claro que la idea de que ninguna persona privada de la libertad permanezca detenida en comisarías y alcaldías, sino que se alojen en cárceles y complejos que garanticen mayor seguridad. Respecto al resto de la población carcelaria que aún quedó en la Alcaldía de Melincué, Masneri dijo que no fue trasladada por «falta de cupo», pero cuando las obras de infraestructura la permitan serán reubicados.
Consultada por qué no se trasladó antes a los detenidos, algunos de ellos sumamente peligrosos, Masneri dijo que porque la política de gobierno no lo prefirió y recordó que estos movimientos responden a una «decisión política» que lleva adelante el Gobernador Maximiliano Pullaro.